El Partido Revolucionario Moderno (PRM) se encuentra en medio de un desafío ético y político tras la denuncia de «alta traición» de funcionarios municipales y dirigentes del PRM que impidieron el triunfo de la excandidata de ese partido en el municipio de Tenares, la licenciada María Fabiola Javier González.
En Cenoví, la expulsión de cinco dirigentes se produjo después de que se evidenció la violación de normas estatutarias durante las elecciones municipales. Estos dirigentes fueron acusados de influir en el voto a favor del candidato de la oposición y los regidores de su corriente, lo que muestra una postura firme contra cualquier acción que ponga en peligro la integridad del partido y sus candidatos.
De manera similar, en Pimentel, el PRM actuó con decisión al expulsar a su presidente municipal y a otros siete dirigentes por influir en el voto a favor del candidato del partido Fuerza del Pueblo y de sus candidatos a regidores a lo interno del partido. Esta medida refleja un compromiso con la lealtad interna y la unidad del partido.
Sin embargo, el caso de Tenares plantea preocupaciones adicionales. Las acusaciones de traición formuladas por la excandidata a la Alcaldía, María Fabiola Javier González, han generado desconcierto y malestar, tanto en la comunidad como en el presidente Luis Abinader. González denunció públicamente que funcionarios municipales y dirigentes de su partido influyeron en el voto a favor del candidato de la Fuerza del Pueblo y sus candidatos a regidores, tal cual ocurrió en Cenoví y Pimentel en la provincia Duarte, y afirmó contar con pruebas contundentes de esta traición cobarde llena de rencor y mezquindad y deslealtad.
La falta de conciliación del liderazgo político a nivel local y provincial ha llevado a que las investigaciones sobre esta traición sean transferidas a un fiscal y a la alta dirigencia nacional del partido para su resolución. A pesar de los esfuerzos por detener esta traición, incluidas las intervenciones del presidente Abinader quien visitó este municipio los días finales de la campaña municipal, altos representantes del partido, incluido Guido Gómez Mazara, la influencia de los traidores persistió , según expresó Javier González.
El clamor por justicia se extiende por toda la provincia, con la pregunta: ¿Cuándo se castigará a los traidores en Tenares? La falta de acciones firmes podría socavar la confianza de cara a las próximas elecciones nacionales y congresuales, ya que de no ser expulsados los traidores , en mayo podrían ejecutar una traición mayor.
El PRM se enfrenta a un desafío crucial en la provincia, donde la traición política amenaza con socavar los principios democráticos y destruir la carrera de algunos líderes que no han entendido que sólo con la lealtad partidaria se logra la confianza a nivel local y nacional . Sólo una respuesta justa y transparente podrá restaurar la confianza en el partido y garantizar un futuro político próspero para el PRM en esta provincia.